Cauterio de Lucía Litjmaer

Nuestra última lectura del curso va a ser la segunda novela de Lucía Litjmaer, una escritora argentina afincada en España. La comentaremos en la última sesión del curso 2022-2023, el próximo día 15 de mayo.

LA AUTORA

La escritora argentina Lucía Lijtmaer. Foto EFE/Alejandro García

Lucía Litjmaer (Buenos Aires, 1977) creció en Barcelona, aunque lleva ya varios años instalada en Madrid. Es escritora y crítica cultural. En los últimos años se ha convertido en una de las voces más relevantes y versátiles de nuestro panorama cultural. Además de sus colaboraciones en prensa y radio, esta periodista con una fortísima pulsión literaria ha publicado una novela con forma de crónica (Casi nada que ponerte, 2016), un ensayo sobre la toma de conciencia feminista (Yo también soy una chica lista, 2017) y otro en el que fustigaba los lugares comunes de los nuevos reaccionarios (Ofendiditos. Sobre la criminalización de la protesta, 2019). Su más reciente novela es Cauterio.

La autora, además, ha organizado un festival de humor feminista llamado Princesas y Darth Vaders:

y es la responsable, junto con su amiga y compañera de fatigas Isa Calderón, de uno de los pódcast más escuchados de España, Deforme Semanal Ideal Total, que ya les ha valido dos premios Ondas.

LA NOVELA: CAUTERIO (2022)

La novela de Litjmaer cuenta, en realidad, dos historias, entrecruzadas en capítulos consecutivos. La primera narra la odisea de una mujer joven, en la Barcelona de 2014, que vive aniquilada por el desamor de un hombre que no la trata bien. La segunda nos lleva a la Nueva Inglaterra puritana del siglo XVII y nos cuenta la historia de dos mujeres: Deborah Moody y Anne Hutchinson.

Deborah Moody fue una terrateniente británica que huyó de Londres en 1639 en busca de oportunidades en el Nuevo Mundo. Allí logró montar su propia comunidad y fundó lo que hoy se conoce como Gravensend, en la actual Brooklyn. Ella hizo el primer trazado urbanístico moderno y fue considerada la mujer más peligrosa del mundo en ese momento.

Anne Hutchinson on trial (Edward Austin Abbey, 1901)

Anne Hutchinson fue una conocida teóloga, que emigró a América y luego fue expulsada de su propia comunidad en Massachussets por sus ideas innovadoras sobre la religión, por lo que sufrió una doble expulsión.  La novela sigue a ese personaje que acabó asesinada por los nativos norteamericanos cerca de Long Island.

La protagonista de la época contemporánea es un ente imaginario, un zombie sin nombre que transita por la Barcelona del triunfalismo de los primeros años del siglo XXI, «tan ricos, con ese Fórum Universal de las Culturas, esa idea faraónica de la ciudad y sus monumentos».

Mientras que la ciudadanía disfruta y protagoniza ese despertar democrático, ella vive en un pozo de profunda depresión que le gustaría que se tragase todo y a todos. La cruda frase inicial de la novela: «Durante mucho tiempo solamente me quiero matar» nos da una idea del grado de desolación de esta mujer que, en un relato en primera persona, se desnuda ante los lectores, convirtiéndonos en testigos del desengaño que la llevó al lugar donde está ahora, devastada emocionalmente y alejada de la vida que siempre había llevado.

Carlos Zanón, en su crítica del libro en El País, dice que «nueve de cada diez veces sale mal la propuesta literaria de dos historias paralelas separadas en el tiempo y en el espacio». Lo normal, prosigue Zanón, es que una de las historias sea más consistente, verosímil o interesante que la otra o que la impericia del autor o autora haga más visibles los fallos constructivos de la novela.

No es el caso de Cauterio ya que la autora consigue, en un alarde de talento y oficio, salir airosa de la compleja empresa.  Los relatos de las protagonistas describen, con maestría narrativa y salpicados de retazos de humor, terror y aventura, los esfuerzos que las mujeres llevan siglos haciendo por ser libres. No solo respecto del poder y de la religión, sino también respecto de la misma idea del amor. Son voces-cuerpos que hablan desde las entrañas, astilladas, sin correcciones morales.

Las voces, el vocabulario y el estilo empleados por la autora en el relato de las vidas de las mujeres del siglo XVII son completamente distintos a los que utiliza cuando escribe desde lo contemporáneo, pero en ningún momento se nota el cambio de plano.  Este es uno de los grandes aciertos del libro, además de la manera un tanto cortazariana de unificar al final del libro ambas historias.  

Lucía Litjmaer elige a un personaje como el de Deborah Moody, que sobrevivió en una sociedad y en un ambiente donde la persecución era la norma, y lo inserta en el monólogo interior de una mujer que, cuatrocientos años después, tiene que emprender otro tipo de huida para superar el dolor, la soledad y la sensación de vacío y abandono que le ha dejado una relación rota.

Las mujeres de Cauterio tienen la sensación de haber ser traicionadas, ya sea por amor, por el matrimonio o por la convicción religiosa y, como dice la autora, «la resiliencia les llega a las dos a través de la venganza, que es un tema imprescindible en la ficción».

Cauterios de Paré

La novela funciona como el instrumento quirúrgico que le da nombre: es capaz de abrir la carne y hacer herida, y después cauterizarla provocando un ardor que desaparece y cura. «Así es el proceso de sanación de los personajes», explica la autora en una de sus entrevistas, donde indica también que «el libro quiere funcionar como algo que pica, que arde, pero que es necesario para detener una infección.»

En fin, en la novela hay traiciones, desarraigos, fantasías apocalípticas, pero sobre todo se muestra la fragilidad de los vínculos— los económicos, los emocionales, los sociales— y muestra cómo el amor puede devastar a una persona. Todo funciona: los personajes, el tono, los sentimientos y las acciones. Quizá el final decepciona un poco… ya me contaréis.

SABER MÁS…

La editorial Anagrama preparó dos vídeos sobre la novela. El primero, titulado Aire y agua:

Y el segundo, titulado Tierra y fuego:

También podéis ver esta entrevista a la autora:

El programa de RTVE Página 2 realizó también una entrevista a la autora a propósito de la publicación del libro: